En 1853 Degas forma parte del taller del pintor Félix-Joseph Barrias y un año después estudia bajo la tutela de Louis Lamothe, seguidor de Jean Auguste Dominique Ingres. Su privilegiada condición social, le permitió conocer las colecciones particulares de pintura de la clase alta parisiense y formarse en la tradición clásica como autodidacta a través de múltiples viajes. En casa de su tío el barón Bellelli, en Florencia, Degas tuvo acceso a copias y originales de Rafael Sanzio, Andrea Mantegna, Piero Pollaiuolo, Domenico Ghirlandaio y Sandro Botticelli.
En la década de los sesenta, la posibilidad de entender la pintura como un ejercicio artístico, ajeno a las alegorías y al trasfondo moralista de los grandes cuadros de historia, era todavía dudosa.Pero con las muertes de Vernet, Delacroix e Ingres se abrió un espacio en el que pudo desarrollarse, gracias a Manet y al mismo Degas, lo que Baudelaire denominó enfáticamente el “heroísmo de la vida moderna”. Es en ese período cuando pinta La familia Bellelli (primas del autor) que muestra un análisis visual de la familia en el que los caracteres de los personajes, junto con la verosimilitud del mobiliario y los objetos personales, constituyen una composición realista, fiel testimonio de la vida moderna.
Información obtenida de: https://www.biografiasyvidas.com/biografia/d/degas.htm